En este artículo, descubrirás cómo transformar una piscina exterior pequeña en un oasis de tranquilidad y diversión. Con ideas prácticas y creativas, podrás maximizar el espacio disponible y crear un ambiente encantador que te invitará a sumergirte en el agua durante todo el verano.
Qué puedo poner alrededor de una piscina
Si tienes una piscina en el exterior de tu hogar, es importante que la rodees con elementos que realcen su belleza y la hagan más funcional. En este artículo te daremos algunas ideas para maximizar el espacio alrededor de tu piscina y hacerla aún más atractiva.
Materiales para el suelo
El suelo alrededor de tu piscina debe ser antideslizante y resistente al agua. Las opciones más populares son la piedra natural, la baldosa y la madera tratada. La piedra natural es elegante y duradera, aunque puede ser costosa. La baldosa es versátil y fácil de cuidar, pero puede ser resbaladiza si está mojada. La madera tratada es económica y atractiva, pero requiere un mantenimiento regular para evitar que se deteriore.
Mobiliario de exterior
El mobiliario de exterior puede ser una excelente adición al espacio alrededor de tu piscina. Las tumbonas son ideales para tomar el sol, mientras que las mesas y sillas te permiten disfrutar de comidas y bebidas al aire libre. Asegúrate de elegir materiales resistentes a la intemperie, como el aluminio, el mimbre o el acero inoxidable.
Vegetación
La vegetación puede ayudarte a crear un ambiente relajante y fresco alrededor de tu piscina. Las plantas tropicales como las palmeras y los helechos son ideales para este propósito. También puedes optar por arbustos y flores que florezcan durante el verano para agregar color y fragancia al espacio.
Illuminación
La iluminación adecuada puede hacer que tu piscina se vea aún más impresionante por la noche. Las opciones populares incluyen luces LED sumergibles, luces solares y farolas de jardín. No solo mejoran la estética, sino que también mejoran la seguridad alrededor de la piscina.
Dónde poner la piscina en el jardín
Si estás pensando en instalar una piscina en tu jardín, es importante que consideres varios aspectos antes de tomar una decisión. Uno de los más importantes es el lugar donde la vas a ubicar.
En el caso de piscinas exteriores pequeñas, es fundamental maximizar el espacio disponible y elegir una ubicación estratégica que permita un fácil acceso y una buena integración con el resto del jardín.
Una opción muy popular es colocar la piscina cerca de la casa, en un lugar visible desde el interior y con una buena iluminación natural. De esta manera, podrás tener un fácil acceso a la piscina desde la casa y disfrutar de vistas espectaculares desde el interior.
Otro lugar interesante para colocar la piscina es en un rincón del jardín, rodeado de árboles y plantas. De esta manera, podrás crear un ambiente natural y relajante, ideal para disfrutar del sol y el agua en los días más calurosos.
Si tienes una terraza o un patio amplio, también puedes considerar la opción de instalar una piscina elevada o semienterrada. De esta manera, podrás aprovechar al máximo el espacio disponible y crear un ambiente moderno y sofisticado.
Es importante que tengas en cuenta la orientación del sol y la sombra en el lugar donde piensas ubicar la piscina. Si el sol es muy fuerte en esa zona, puede ser necesario instalar una sombrilla o un toldo para protegerte del calor.
En resumen, para maximizar el espacio disponible y crear un ambiente agradable y funcional, es importante elegir cuidadosamente el lugar donde colocarás la piscina en tu jardín.
Cuáles son las medidas de una piscina pequeña
Si estás buscando ideas para maximizar el espacio en tu patio, un gran lugar para comenzar es con una piscina exterior pequeña. Con una piscina pequeña, puedes disfrutar de la comodidad de tener tu propio lugar para refrescarte, relajarte y disfrutar del sol sin ocupar todo tu espacio exterior. Pero, ¿cuáles son las medidas de una piscina pequeña?
Las medidas de una piscina pequeña pueden variar dependiendo del tamaño de tu espacio exterior y de tus necesidades. En general, una piscina pequeña puede tener un ancho de 2 a 3 metros y una longitud de 3 a 5 metros. La profundidad también puede variar, desde 1 metro hasta 1,5 metros, dependiendo de si deseas tener una piscina para nadar o simplemente para relajarte.
Es importante tener en cuenta que, aunque las piscinas pequeñas pueden ocupar menos espacio, todavía necesitan un área adecuada alrededor de ellas para que las personas puedan moverse con facilidad. Por lo tanto, asegúrate de tener suficiente espacio para una pequeña terraza o área de relajación para complementar tu piscina.
Además, considera el tipo de piscina que deseas tener. Una piscina pequeña puede ser una piscina de concreto, una piscina de fibra de vidrio o una piscina inflable. Cada tipo de piscina tiene sus propias ventajas y desventajas, por lo que es importante investigar y elegir la opción que mejor se adapte a tus necesidades y presupuesto.
En resumen, las medidas de una piscina pequeña pueden variar dependiendo de tu espacio exterior y tus necesidades, pero generalmente tienen un ancho de 2 a 3 metros y una longitud de 3 a 5 metros, con una profundidad de 1 a 1,5 metros. Asegúrate de tener suficiente espacio alrededor de tu piscina para una pequeña terraza o área de relajación y considera cuidadosamente el tipo de piscina que deseas tener. Con una piscina pequeña, puedes disfrutar de un oasis privado en tu propio patio trasero.
En conclusión, tener una piscina exterior pequeña no significa que tengas que comprometer su estilo y funcionalidad. Al incorporar ideas como la elección de materiales adecuados, la implementación de sistemas de iluminación estratégicos y la inclusión de características como cascadas o fuentes, puedes maximizar el espacio disponible y crear un oasis relajante en tu propio patio trasero. Al utilizar estas ideas y un poco de creatividad, puedes transformar una piscina pequeña en un lugar de ensueño para disfrutar con amigos y familiares durante los meses de verano.
